Buenos y malos hábitos en nuestra alimentación

“Que tu medicina sea tu alimento” Hipócrates 460-370 a.C.

Hace 25 siglos Hipócrates, el padre de la medicina, ya sabia que la alimentación tiene una influencia decisiva en nuestra salud. Los nuevos descubrimientos científicos que nos han conducido a lo que hoy conocemos como medicina moderna no han hecho sino consolidar esta sentencia. 

Ahora que ya estamos terminando las vacaciones y el verano, debemos volver a recuperar los buenos hábitos en alimentación. En este post vamos a ver algunos de los buenos hábitos de alimentación que podemos incorporar en nuestro día a día y también aquellos que debemos evitar. 

Algunos buenos hábitos

1. Comer alimentos que son nutritivos y que aportan beneficios a tu salud. Este grupo de alimentos pueden ser frutas, verduras, legumbres, frutos secos, derivados de la leche, cereales integrales, etc. 
2. Evitar alimentos procesados. Este grupo de alimentos ha pasado a ser algo normal en nuestro día a día. Evita por encima de todo comprar algo que viene empaquetado y estarás cumpliendo este punto. 
3. Cocina de manera que mantengas las propiedades de los alimentos. No los quemes. Por ejemplo, más cocina al vapor y cocción lenta. 
4. Disfruta de la comida y del tiempo de comer. Es lo más normal del mundo comer mientras mires la tele. Debes concentrarte en lo que estas haciendo en ese momento, que es comer y saboreas los alimentos. Comer sin darse cuenta de lo que estas comiendo es una forma de empezar mal la digestión. 
5. La mejor hidratación es el agua. No hay nada mejor que el agua para nuestras comidas. 
6. No recurras a repostería. 

Algunos malos hábitos

1. Comer rápido
2. Comer mas de lo que necesitas
3. Comer cualquier cosa ya preparada, para evitar el proceso de la compra, preparación, cocción y limpieza. 
4. Comer a gusto del paladar totalmente distorsionado debido a continuos excesos.
5. Comprar a ciegas lo que nos venden por televisión.
6. Comer mientras realizamos otras tareas a la vez. 

Todas las comidas del día son igual de importantes, tu mereces comer lo mejor sin importar la hora del día. Pero lo que nos va a convertir en personas sanes es el día a día y cada día tenemos muchas oportunidades de hacer una buena elección. La suma de cada pequeña decisión marcará el resultado.